Carta única y diversa

Eres una situación que el reloj y el tiempo deseó pasar, es complicado, entender que eso incluyó cosas y personas que en su presente no me imaginé la vida sin ellas, tantas cosas me llenaron y otras solo me golpearon, pero aunque duela, así es esto.

Entre desvelos y lágrimas pretendo superarte, seguir el resto del hilo; aún no es el final y admito que soy feliz por ello, también te confieso que me dueles, no eres fácil de olvidar, porque aunque no quisiera eres parte de mi vida, y quizá la más importante.

Tantas personas y cosas que me hacían feliz ya no están, sabías que no quería perderlas, eran mi vida y aún así se fueron contigo.

Eres horriblemente necesario, pero no te reprocho todo, al menos me dejaste con los recuerdos, dignos de traer de nuevo a mi mente. Pero me pregunto ¿Cuál es tu necesidad de elevarme al cielo y justo cuando estoy bien, mandarme al suelo sin paracaídas? es obvio que no tendré respuesta, pero gracias; aunque casi siempre me canse de cada agresivo empujón sin cuidado alguno, me has enseñado a que puedo levantarme y elevarme de nuevo se vuelve cada vez un poco más fácil. Sólo, por favor, la próxima vez que me vayas a lastimar así, avísame, tal vez pueda arreglármelas para mantenerme más tiempo a flote, aunque, tampoco lo harías ¿verdad?

Me siento exhausta, quiero alejarme de ti, pero me persigues como mascota , o tal vez sea al revés, tal vez solo deba agradecer y continuar intentando hasta mantenerme a flote. Que aunque te lo pida, al final depende de mí ¿verdad?

Gracias, de todos modos, debo continuar con mi trabajo de lucha.

Te escribo cuando haya logrado estar firme y a flote, otra vez.

Con dolor y nostalgia:

Mi yo del presente.

Deja un comentario

Diseña un sitio como este con WordPress.com
Comenzar